La madera, recurso eficiente y ecológico

30/03/2012 Madera
Los caseríos del siglo XVI como Igartubeiti se construían en madera, las viviendas ecológicas actuales también utilizan este material porque refuerza el aislamiento interior del edificio y además es más eficiente y ecológico.

Sube la factura de la electricidad, nuestros antepasados no tenían esos problemas en los caseríos, tampoco los tendrán en la casa Vita, la primera vivienda ecológica que produce más energía de la que consume y que está situada en Euskal Herria, en el municipio vizcaíno de Natxitua.

Los caseríos del siglo XVI, también Igartubeiti fueron construidos en madera, es cierto que entonces abundaba, no como en la actualidad que escasea. La madera es un material que refuerza el aislamiento interior de los edificios.

Si bien los caseríos tenían ventanas al exterior, durante los meses de invierno y en la estación lluviosa permanecían siempre cerradas, ya que eran consideradas como un peligroso punto de fuga térmica y en los caseríos no existía la posibilidad de cerrarlas con cristal, debido a la escasez y elevado precio del mismo. La carencia de vidrio para ventanas se suplía ocasionalmente con telas de lino fino tensadas sobre un marco de madera e impermeabilizadas con cera blanca, para refugirse del frio y para que entrara claridad.

La orientación solar de la vivienda es fundamental. En el caso de Igartubeiti, no está situado en la ribera del río, sino en un reducido rellano a media ladera, a ochenta metros de altitud sobre el fondo del valle. La ladera, perteneciente a las estribaciones del monte Kizkitza, está orientada al sur y el caserío recibe desde primeras horas de la mañana el calor directo de la luz solar. Su propio tejado actúa como divisoria de aguas entre dos profundos arroyos.

La casa Vita está orientada en sentido horizontal, en sentido de la posición solar. Esta vivienda ecológica y el caserío Igartubeiti tienen algunas características en común.

Le empresa Egoin ha sido la responsable de construir esta vivienda ecológica y lleva cinco años apostando por el empleo de nuevos materiales constructivos más sostenibles, eficientes y menos contaminantes. Esta vivienda de Natxitua está equipada por paneles fotovoltaicos y térmicos que permiten recuperar la energía consumida.

Frente a la subida de la factura de electricidad no nos queda más que seguir los consejos para ahorrar energía propuestos por EVE.

Ventanas del caserío Igartubeiti